Son cinco días, de lunes a viernes, pernoctando en un cortijo junto a la orilla del pantano de Alange, con piscina, barbacoas, juegos, concursos, actividades formativas y todo ello con los compañeros y sus monitores. De esta forma despiden el curso unos cincuenta usuarios de Aprosuba 2 de Almendralejo.

Este cortijo que se encuentra en el pantano de Alange es propiedad de Cajalmendralejo, pero lo ha cedido a la asociación para su explotación. Aprosuba 2 lo utiliza todo el año, sobre todo cuando llega el buen tiempo. Incluso este año ha realizado mejoras para acondicionar el edificio con fondos propios y la colaboración de los padres, desde arreglar la cubierta hasta acondicionar habitaciones porque la demanda para los campamentos ha sido mayor. También ha contado con la colaboración del ayuntamiento, que se ha encargado de realizar el desbroce de la maleza en el exterior.

Así, en estos días, Aprosuba está celebrando sus tradicionales campamentos con sus usuarios. Esta semana y la que viene casi cincuenta de ellos estarán en estos campamentos durante cinco días en dos turnos. La presidenta de Aprosuba, Pepa Carrasco, asegura que esta iniciativa sirve además para que los padres puedan descansar del cuidado de sus hijos y también para que éstos salgan de su rutina habitual y puedan disfrutar de unas pequeñas vacaciones.

El alcalde, José García Lobato, visitó ayer este cortijo junto a la directiva de la asociación con el fin de ver a los usuarios y comprobar los trabajos de mejora que se han hecho. El edil se mostró satisfecho con la visita porque aseguró que los usuarios se han ilusionado con ver al alcalde y mostró a la asociación la buena predisposición del ayuntamiento y la posibilidad de ceder material o mobiliario para el cortijo si lo reclama o necesita la asociación.