La Junta de Extremadura desmiente a Ecologistas en Acción y garantiza que la planta de biometano de Almendralejo no afectará a los acuíferos de Tierra de Barros

La Junta de Extremadura ha respondido con firmeza a las acusaciones vertidas por Ecologistas en Acción, que esta semana advertían sobre el supuesto riesgo de contaminación por nitratos derivado de la futura planta de biometano proyectada en Almendralejo por la empresa Biomet. Desde el Ejecutivo autonómico se asegura que dichas afirmaciones carecen de fundamento técnico y son falsas, subrayando que el proyecto cumple escrupulosamente con toda la normativa ambiental vigente y ha sido objeto de un proceso de evaluación ambiental reglado y exhaustivo.

Fuentes de la Junta recuerdan que la instalación fue sometida a la evaluación establecida en la Ley 21/2013 de Evaluación Ambiental, procedimiento al que también remite la Ley 16/2015 de Protección Ambiental de Extremadura. En base a esta legislación, el proyecto fue tramitado mediante el procedimiento simplificado, al no presentar impactos significativos sobre el medio ambiente. Se trata de un procedimiento perfectamente regulado y habitual en proyectos de este tipo.

En cuanto a las acusaciones sobre posibles riesgos para los acuíferos de Tierra de Barros, la Junta lo niega tajantemente. “Es falso que se puedan ver afectados, ya que el proyecto ha sido analizado por los técnicos y por los organismos competentes en la materia”, señalan. De hecho, la Confederación Hidrográfica del Guadiana ha emitido un informe favorable y ha autorizado el proyecto en el ámbito de sus competencias.

Asimismo, se destaca que la planta incorpora una balsa de almacenamiento artificial diseñada “con todas las garantías técnicas y de seguridad ambiental”. Los técnicos de la Junta supervisarán de manera continua que dicha balsa esté completamente impermeabilizada, con el fin de evitar cualquier filtración hacia los acuíferos y preservar la calidad del suelo y las aguas subterráneas.

Ecologistas en Acción había denunciado que la instalación podría agravar la contaminación por nitratos en una zona declarada vulnerable y sensible, alegando que el informe ambiental no contempla adecuadamente el destino del nitrógeno ni el manejo del digestato. Sin embargo, desde la Junta se insiste en que el proceso ha sido riguroso, transparente y ajustado a la legislación europea, nacional y regional, y que el proyecto cuenta con todas las autorizaciones necesarias.

Desde la Administración regional siempre han sostenido que la planta de biometano de Almendralejo representa una apuesta por la economía circular y las energías limpias, que generará empleo y valor añadido en la comarca sin comprometer el equilibrio medioambiental de Tierra de Barros.