Si se hace una comparativa de lo que costaba el agua en Badajoz en 1996 y lo que supondrá a los abonados abrir el grifo en el 2005, el incremento de las tarifas roza el 80%, según los cálculos que ha realizado el concejal socialista José Ramón Suárez, a los que el concejal responsable del agua, Nicasio Monterde, no quiso contestar ayer.

En 1997, las tarifas subieron un 42%. Al año siguiente el incremento fue del 11%. En el año 2000 el agua subió un 8% y en el 2002, un 5,8%. En el 2003 no hubo incremento, porque no lo aprobó la Comisión Regional de Precios y en el 2004 el ayuntamiento no lo solicitó. Si se suman todos estos porcentajes, entre el 96 y el 2002 el precio del agua en Badajoz se ha incrementado un 72,63%. Esta cifra llega hasta el 80% si se tiene en cuenta el 7% de subida que acaba de aprobar la Junta de Gobierno Local del ayuntamiento.

Suárez se quejó de que el gobierno municipal no haya hecho público un cuadro de tarifas, para poder comparar los precios con los de otras ciudades. Aún así, el concejal se aventuró a decir que Badajoz está entre las poblaciones del país donde el agua es más cara, muy por encima de la media nacional.

DESPROPORCIONADO Los socialistas consideran que el incremento del 7% anunciado es "desmesurado, desproporcionado y fuera de lugar" y Suárez recordó que cuando la Comisión Regional de Precios no aprobó la subida que propuso el ayuntamiento, se debió a que "no estaba debidamente justificada".

El concejal popular Alejandro Ramírez del Molino explicó la subida del 7% por el IPC acumulado de los dos últimos años, pero Suárez señaló que en año de elecciones el ayuntamiento no sube el agua. Además, el concejal del PSOE apuntó que el pasado 9 de enero hubo un acuerdo de la Junta de Gobierno Local por el que señaló que no procedía acceder a la revisión de tarifas que proponía la empresa concesionaria del servicio, Aqualia, porque no había razones que rompieran las tarifas de equilibrio presupuestario, aprobado el 29 de noviembre del 2002.

Además, según el socialista, el ayuntamiento está compensando a Aqualia de muchas otras formas, no sólo vía tarifas, sino con adjudicaciones directas de las obras del Plan Director.

Asimismo cada año la Administración local transfiere cantidades a Aqualia para el equilibrio financiero de la empresa. En el 2001 el ayuntamiento pagó a Aqualia 900.000 euros; en el 2002, 510.000 euros; en el 2003, 2,2 millones de euros y, en el 2004 la cantidad se eleva a 2.300.000 euros.