La asociación de vecinos de Antonio Domínguez ha desconvocado una concentración como signo de buena voluntad ante la promesa del ayuntamiento de atender todas sus demandas de mejoras en el barrio, según manifestó ayer el presidente de este colectivo, Francisco Gutiérrez.
La protesta era para exigir vigilancia a la entrada y salida del colegio, seguridad e higiene en la explanada de la parroquia, medidas de tráfico y la limpieza de los alrededores del pabellón polideportivo.
Gutiérrez hizo estas manifestaciones ayer, tras entrevistarse con los tenientes de alcalde Alejandro Ramírez del Molino y Cristina Herrera, en la convivencia organizada por la asociación por el día del socio, en el hogar del pensionista y en el exterior.
Entre 400 y 500 personas degustaron una sardinada y un puchero de garbanzos con rabo, morcillas y otras golosinas de invierno. También acudieron a acompañar a los vecinos los ediles de la oposición José Ramón Suárez, Luis Angel Ruiz de Gopegui y Lorenzo Blanco.
La asociación había remitido al ayuntamiento siete escritos desde el 2001 explicando las necesidades del barrio sin recibir contestación porque, según dijo ayer Del Molino, no conocían dichas cartas. Gutiérrez afirmó que ya se había dado orden de adecentar la explanada de la iglesia con tierra vegetal, plantación de árboles y adecuación como aparcamiento.
También han pedido que la calle Bambú sea de un sólo sentido y no se permita aparcar por motivos de seguridad de los escolares; y que se limpie la zona del polideportivo porque los niños no pueden jugar en la calle por miedo a "que les muerdan las ratas y las culebras", dijo el presidente de la asociación.
