Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer a un menor de edad por disparar con una escopeta de cartuchos a un hombre de 35 años, al que hirió en la espalda, en un altercado ocurrido en la plaza Nicolás Díaz Pérez, en Los Colorines. La policía detuvo además al herido y a la madre del menor.
Los hechos ocurrieron sobre las 21.20 horas del lunes cuando la policía recibió una llamada alertando del altercado, por lo que se personaron varias dotaciones en el lugar, donde detuvieron al presunto autor de los disparos y a la madre de éste, E. F. N., de 55 años. Además intervinieron el arma con la que presuntamente había disparado, una escopeta de cartuchos de 12 mm., y tres cartuchos.
El herido fue localizado posteriormente por la policía en el Servicio de Urgencias del Hospital Infanta Cristina, donde fue detenido y trasladado a las dependencias de la Jefatura Superior de Policía en Extremadura, tras ser asistido de las heridas.
Según la policía, el incidente se pudo originar a raíz de las amenazas que el herido realizó a la madre del menor debido a un asunto relacionado con el tráfico de estupefacientes en la zona.
Esta teoría fue corroborada por vecinos de Colorines, que aseguraron que los detenidos tienen relación con el tráfico de drogas y que las heridas causadas por los disparos no fueron graves porque los cartuchos eran de posta.
La operación continúa abierta, por lo que no se descartan nuevas detenciones, según la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, quien aseguró ayer que la policía trabaja intensamente en determinar lo ocurrido.
SOLUCION Según explicó, estos hechos, que ocurren con cierta frecuencia en Los Colorines, "son siempre por conflictos entre familias o grupos no organizados que tienen algún problema y que intentan tomarse la justicia por su mano".
Aunque la policía trabaja para evitar este tipo de hechos, Pereira reconoció que "la zona de Los Colorines es una zona complicada, no sólo desde el punto de vista de la seguridad sino del punto de vista social". Por ello, insistió en la necesidad de implicarse todas las administraciones, "lo hizo la Junta y la delegación del Gobierno con controles de seguridad, pero aquí tienen que trabajar todas las administraciones que tienen competencias".
Aunque este barrio carece de un dispositivo policial permanente, Pereira afirmó que los agentes pasan de forma continua "y hay momentos en los que no hay un coche, lo que no significa que tarden más de una hora u hora y media en pasar".
