El delegado del Gobierno, Germán López Iglesias, quiso estar ayer junto a Miguel Celdrán, a quien definió como "mi amigo del alma", en su despedida. "Creo que es el mejor alcalde que ha tenido Badajoz en mucho tiempo, no solo por los años que ha estado, sino por la cantidad de cosas que ha hecho", destacó.

López Iglesias reconoció que el de ayer era un día "difícil" para Celdrán, porque materializaba una decisión que ha meditado durante mucho tiempo y que "nadie creía que iba a llegar". "El se ha ido por la puerta grande, nadie lo ha obligado a irse, nadie ha querido que se vaya, pero él ha querido irse". Según el delegado, los años de dedicación política y su edad eran "suficientes" para dar paso al relevo.

López Iglesias, que ha formado parte del equipo de gobierno asumiendo diferentes delegaciones hasta su marcha a la Delegación del Gobierno, quiso agradecer a Celdrán "todo lo que ha hecho por Badajoz y por mí, que también ha hecho muchas cosas".