Las obras de desdoblamiento de la carretera de Elvas hasta la conexión con la autovía E-90, en dirección a Caya y a Badajoz, ya están terminadas, lo que le da un aspecto urbano que, además de seguridad en el tráfico, fluidez y mejora de las condiciones para la conducción, acerca la ciudad lusa a la vecina capital pacense, donde a la salida de la autovía entronca con la avenida de Elvas, en una suerte de continuidad.

José Antonio Rondao manifestó a este diario que esa vía acerca Elvas a Badajoz y viceversa y recordó que "cuando gané las elecciones en el 1994 y tomé posesión del cargo, planteé a nuestro Gobierno que se urbanizara la ciudad en dirección a Caya, pero no lo permitió y todo el desarrollo de infraestructuras se hizo mirando a Lisboa, por falta de visión política".

Contó que en Portugal, un país muy centralizado, "las cosas son difíciles y el Gobierno no permitió que Elvas creciera en dirección a Badajoz, porque, decía, eran terrenos de primera calidad, así es que nuestro crecimiento se hizo en sentido contrario, en dirección Lisboa, mientras Badajoz se desarrollaba mirando a Caya y a Elvas".

Rondao espera que con la línea férrea, el TGV y la plataforma, el desarrollo de ese lado de la frontera se planifique mirando a Caya, pues "esos proyectos van a proporcionar un desarrollo profundo de toda la región". Y deseó ver "un día, Badajoz y Elvas ligadas en un término urbano".