La Asociación de Vecinos del Casco Antiguo ha pedido al ayuntamiento que cambie su política de "derribos" de viviendas y la sustituya por un plan de rehabilitación en la zona. Tras los últimos derribos, en algún caso después de que ciertas dependencias se vinieran abajo, la asociación cree que la solución pasa por la rehabilitación, según su presidente, José María Soriano.

El responsable del colectivo vecinal ha indicado que la solución no pasa por actuar "a las bravas" y que se están derruyendo casas "porque no se hace nada" ante el mal estado de estos inmuebles, al no crearse un plan de rehabilitación "frecuentemente demandado por los vecinos".

En este sentido, ha lamentado que el ayuntamiento acometa la rehabilitación de El Campillo sin tener en cuenta la "historia" de la zona, a través de una urbanización "moderna" y "sin lógica".

Sobre el proyecto presentado por el ayuntamiento, dijo que "no ha modificado su idea ni un ápice". Y añadió que los vecinos también quieren que cada casa se levante sobre una parcela, ni torreones ni entrada por un patio interior privativo. Soriano ha recordado que distintos colectivos trabajan en una mesa que elaborará unas conclusiones que se trasladarán "con la mayor brevedad posible" al alcalde.

Otra de las decisiones que la asociación cree que puede cambiarse es el derribo del Cubo de Biblioteconomía y para ello se realizará alguna medida en breve.

REALOJO Por otro lado, el ayuntamiento realojará a las dos personas afectadas por el derrumbe del pasado fin de semana de una vivienda contigua a la que residen, de propiedad municipal, en el 52 y 53 de la calle Eugenio Hermoso (Las Peñas).

El derrumbe su produjo en el interior de dicho inmueble, particular y deshabitado, "por la acumulación de agua en el patio de la primera planta debido a la falta de mantenimiento de sus desagües", según indica en una nota de prensa.

La misma señala que "ante la denuncia de un vecino, se personó un arquitecto municipal y viviendo las consecuencias que el derrumbe podía tener para el inmueble contiguo, creyó oportuno desalojar el mismo, en el cual residen dos personas". Estas se trasladaron inicialmente a vivir con un familiar.

Además, los técnicos municipales analizaron ayer "los daños con mayor profundidad y decidieron mantener las medidas cautelares, aunque de manera aparente la vivida de propiedad municipal no presentase daño alguno".