De los 226 días transcurridos del 2019 apenas una decena se ha cubierto el mínimo de bomberos de guardia en el parque municipal de Badajoz, según denuncian los propios efectivos. El reglamento establece que en cada turno debe haber 10 bomberos y un operador de comunicaciones de servicio, pero esta norma se incumple «de manera sistemática», aseguran.

«A diario estamos entre dos y tres personas menos de las que debería haber. Es un problema que se ha vuelto crónico y que llevamos dos años y medio esperando a que se resuelva», critica Carlos Agama, representante sindical de Aspolobba y miembro de la asamblea de bomberos. A ello, según explica, se añade la falta de mandos, pues no hay un jefe de guardia y otro de equipo por turno como obliga la normativa, por lo que hay bomberos que tienen que asumir funciones de un rango mayor al suyo «prácticamente cada día».

Los bomberos alertan de que la escasa plantilla del parque municipal pone en riesgo la seguridad del ciudadano y su propia integridad, de lo que, según Agama, hacen «responsable» al alcalde, Francisco Javier Fragoso, pues llevan años advirtiéndole de la urgencia de que se incremente el número de efectivos para atender las necesidades de una ciudad como Badajoz, con más de 150.000 habitantes y un término municipal de casi 1.500 kilómetros cuadrados. «Es a Fragoso al que correspondería haber solucionado esto hace tiempo», recalca el representante sindical, quien recuerda que tras el conflicto que enfrentó a los bomberos y al ayuntamiento se alcanzó un acuerdo en el que se garantizaba que estaría cubierto el mínimo de efectivos por guardia, «pero no ha sido así».

Los bomberos critican que el sistema de localización, que se puso en marcha para que en caso de situaciones de urgencia el parque no quedara desatendido, se esté utilizando para paliar la falta de efectivos y para cubrir las bajas. «La localización no está para eso y hay días que se ha activado hasta dos veces». La última fue el martes por la noche, cuando se declaró un incendio de pastos en una finca en la zona de Casas Aisladas de Gévora. En principio se desplazó un camión, pero la proximidad de las llamas a una vivienda obligó a enviar otro vehículo y a seis efectivos, de los 9 que había de guardia ese día, que estuvieron trabajando en la extinción durante cuatro horas. El fuego arrasó 4,5 hectáreas. Al mismo tiempo se originó otro incendio en la Ronda Norte, en las inmediaciones del parque comercial, al que acudieron «un sargento y un bombero» porque no había más personal, dejando el parque sin efectivos durante media hora, hasta que se incorporaron los cinco bomberos avisados por el sistema de localización.

Los bomberos, según recuerda el representante de Aspolobba, renunciaron a seguir reivindicando otras mejoras laborales para que se solucionase la falta de personal, que era lo más «urgente», pero el ayuntamiento «no ha cumplido con su parte», por eso ahora están dispuestos a exigir que se pongan de nuevo sobre la mesa sus demandas, entre ellas la de acceder a la categoría C1 (ahora pertenecen a la C2).

Los representantes sindicales de los bomberos ya han mantenido varias reuniones con la concejala de Recursos Humanos, María de los Hitos Mogena, que se ha comprometido a estudiar el aumento de la plantilla. Los sindicatos reclaman entre 15 y 20 efectivos más, por lo que piden que se empiece a trabajar en la convocatoria de una oposición para que las ocho interinidades con las que se han cubierto las jubilaciones sean plazas en propiedad y se amplíe la plantilla con otras de nueva creación. De momento, van a dar un voto de confianza a la nueva responsable de Personal, pero si la solución se sigue prolongando en el tiempo, no descartan convocar otra huelga indefinida «pues es la única forma de que se cubran los mínimos de guardia que marca el reglamento», asegura Agama.