Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Programación especial

La Orquesta de Extremadura celebra 25 años con música y mirando al futuro

Tres profesionales que han visto crecer esta institución musical extremeña cuentan cómo ha sido su evolución en este cuarto de siglo

Jonás Herrera

Jonás Herrera

Badajoz

La Orquesta de Extremadura(Oex) cumple 25 años y lo celebra con una programación cargada de conciertos conmemorativos. Desde aquel 27 de octubre en la basílica de Santa María de Guadalupe cuando se estrenó esta orquesta hasta ahora han pasado muchos años, muchos acontecimientos y ha logrado consolidarse como una de las instituciones culturales extremeñas más importantes.

Para conmemorar el cuarto de siglo de esta orquesta se han programado dos conciertos especiales uno se celebró ayer en Badajoz y otro hoy en el mismo escenario en que echó a andar, en Guadalupe. La batuta de estos dos recitales la tomará Jesús Amigo, quien fuera director de esta institución desde el año 2000 hasta 2012.

Mimando a la Ojex

Además de estos dos conciertos centrales, la Orquesta Joven de Extremadura (Ojex), que cumple 20 años, se fusionará con la orquesta principal y reunirá a músicos que comenzaron en la joven y que hoy destacan a nivel nacional e internacional. Para Hae Won, gerente de la Oex, es uno de los momentos más importantes de los que ocurrirán esta temporada: «Este concierto es muy especial para mí porque formé parte de la Ojex. Me encantaría poder tocar, pero personalmente es más especial verlo desde esta perspectiva», asegura.

Estos eventos se desarrollarán el 20 y 21 de noviembre en los palacios de congresos de Badajoz y Cáceres, respectivamente. Entre los invitados destacan Paco López, flautista de Plasencia y solista de la Orquesta de Barcelona, y Joaquín Arrabal, también solista en la misma formación.

Evolución constante

Sobre la evolución de la orquesta, la gerente afirma que «tanto artísticamente como administrativamente ha crecido progresivamente» y apunta a un marcador como es el número de abonos vendidos para esta temporada. «Actualmente contamos con más de 1.100 abonados en toda Extremadura, de los cuales 717 se concentran en Badajoz», señala la gerente. Su equipo está compuesta por diez personas, una plantilla corta que provoca que Won tenga que controlar todos los terrenos. Junto a ella trabaja Diego Pérez, es uno de los veteranos de la casa. Lleva 20 años vinculado a la orquesta y es el responsable de comunicación. Durante estas dos décadas, ha sido testigo de esta evolución: «Cuando yo entré en 2004 el área de comunicación apenas existía. Todo era experimentar y probar».

Diego Pérez, responsable de comunicación de la Orquesta de Extremadura.

Diego Pérez, responsable de comunicación de la Orquesta de Extremadura. / Santi García

Actualmente, la orquesta cuenta con 56 músicos profesionales, además de los más jóvenes que forman parte de los programas educativos de la Oex y los miembros de la Ojex. En total, suman cerca de 200 músicos, según afirma el responsable de comunicación. La Ojex es uno de los logros que señalan estos profesionales porque «funciona como cantera, donde los alumnos viven experiencias como si de una orquesta profesional se tratase», explica Pérez.

Momentos únicos

Aunque añade otros muchos hitos vividos: «Cuando la orquesta sale de Extremadura y representa a la región, nos sentimos muy orgullosos. También colaboramos con el Festival de Mérida, el Festival Ibérico de Cine o eventos de flamenco y fado». También recuerda cuando el compositor de bandas sonoras José Nieto escuchó a la Oex interpretar sus obras en un ensayo y dijo que «nunca había escuchado su música como la estaba oyendo a cargo de los músicos extremeños». Reconoce que esto le llegó muy adentro.

José Martí, oboísta de la Orquesta de Extremadura.

José Martí, oboísta de la Orquesta de Extremadura. / Santi García

Otro de los que ha crecido profesional y personalmente de la mano de la orquesta es José Martí. Este valenciano llegó a Badajoz con 21 años y consiguió su plaza como oboísta. Entre sus recuerdos más especiales destaca el primer concierto en la basílica de Guadalupe, un debut que define como «algo mágico». Recuerda que «había mucha expectación, todos los políticos y el público quería conocer a la nueva orquesta de Extremadura», rememora con emoción.

Primer concierto de la Orquesta de Extremadura en la basílica de Guadalupe el 27 de octubre del 2000.

Primer concierto de la Orquesta de Extremadura en la basílica de Guadalupe el 27 de octubre del 2000. / R. Vivas

Él hizo su vida en la ciudad y no piensa abandonarla. Ha vivido a lo largo de este tiempo cómo la OEX ha pasado de ser una agrupación naciente a consolidarse como una institución madura: «Empezamos a aprender juntos, a tocar y a conocernos. Con el tiempo se ha convertido en una maquinaria muy bien engrasada», señala. Para Martí cree que cada cambio de dirección ha supuesto dar un paso más en cuanto a la calidad: «La orquesta ahora vive un momento de madurez y tiene un nivel bastante bueno».

Detrás de este avance no solo han estado los músicos y directores, también el equipo administrativo que, por ejemplo, trabaja a dos años vista programando sus temporadas: «Para que un concierto se celebre en una fecha concreta se está trabajando desde años: cuadrar artistas, solistas, directores y auditorios es muy complicado, pero lo hacemos con total ambición y anhelo», señala Diego Pérez.

Mirada al futuro

Respecto al futuro, el director de comunicación cree que el objetivo de consolidación y expansión debe pasar por el público: «Queremos que más extremeños nos conozcan, que llenen los auditorios de Badajoz, Mérida, Cáceres y Plasencia, y que la Orquesta de Extremadura siga siendo un referente cultural sólido para afrontar retos mayores en los próximos 25 años».

Por su parte, Hae Won señala que el reto principal es que la OEX se consolide, amplíe su prestigio internacional y siga potenciándose: «Espero que en 2050 la orquesta tenga más recursos económicos para crecer artísticamente». También con la mirada puesta en el extranjero, José Martí afirma con orgullo que «sería bonito hacer giras por España o incluso por países como Alemania, Japón o Estados Unidos. La cultura extremeña merece ser escuchada más allá de nuestras fronteras».

Con un cuarto de siglo de historia, la Orquesta de Extremadura demuestra que la música clásica no solo vive, sino que también conecta con la comunidad y proyecta su talento más allá de la región.

Tracking Pixel Contents