EL OBJETIVO era estudiar la procesión de la Virgen de la Piedad para proclamarla Fiesta de Interés Turístico Regional. Según el alcalde José María Sánchez, el acto reúne a unas 10.000 personas. Lo más singular es el engalanamiento de calles con flores, juncias y arcos decorados con palmeras y olivos por los que transcurre la procesión.