Las reacciones al cierre del concesionario Centrowagen en Don Benito el día 10 por un decreto de alcaldía se suceden. El grupo municipal socialista pidió ayer la dimisión irrevocable del alcalde Mariano Gallego por lo que califica de "cacicada", mientras que la Asociación de la Pequeña y la Mediana Empresa de Don Benito (Apyme), ofreció a sus representantes como mediadores en el conflicto surgido entre ambas partes. Lo hizo en un comunicado en el que también pidió al ayuntamiento "responsabilidad, cordura, respeto y sensatez", que rectifique su postura y "reconduzca la situación a términos más razonables y admisibles, recomendando el diálogo para revertir el conflicto". Una situación que dicen lamentar como empresarios y por la condición de asociado del dueño del negocio. Por eso, dicen solidarizarse y denuncian la dureza de la medida "por un defecto menor". Carece de licencia.
No obstante, dice que su postura no ampara los incumplimientos, ni la desatención de las obligaciones urbanísticas o de otra índole, "y respalda su exigencia y vigilancia de forma equitativa y proporcionada". También reitera que respaldan cualquier actuación administrativa ejecutada de acuerdo a la ley y con respeto a las garantías básicas ante ese tipo de comportamientos.
