Almendralejo

La ropa laboral no es cuestión baladí en la industria alimentaria

El Grupo Dihex destaca la necesidad de utilizar prendas que generen un entorno seguro e higiénico

Industria agroalimentaria.

Industria agroalimentaria. / EP

La ropa laboral en la industria alimentaria desempeña un papel crucial en la seguridad, higiene y calidad de los productos. Cumplir con las normativas establecidas y garantizar características específicas en la indumentaria es clave para mantener un entorno laboral saludable y asegurar la integridad de los alimentos producidos.

Es una cuestión que tienen muy en cuenta en Grupo Dihex, principal referente en la higiene en la industria alimentaria. Expertos de Dihex recomiendan tener en cuenta el certificado estándar 100 de ‘Oeko Tex’, un sistema independiente que verifica que no haya sustancias nocivas ni en textiles ni en fases de fabricación de un producto.

También recomiendan disponer de la norma IFS, otro estándar de calidad de referencia a nivel internacional que afecta tanto a fabricantes como mayoristas, distribuidores, intermediarios y agentes del sector. Esta norma exige que las empresas implementen un sistema de gestión de la calidad y la seguridad alimentaria que incluya la protección de la ropa laboral utilizada por el personal.

Y también recomiendan tener la norma BRC que gira sobre el vestuario del sector alimentario. Indica que los trabajadores deben ser correctamente informados por parte de la empresa sobre cómo debe ser el vestuario de trabajo y de qué prendas pueden prescindir en caso de hacer uso del lavabo o moverse fuera de la zona concreta de trabajo.

Desde Dihex también señalan que la ropa debe usarse únicamente para las tareas específicas y no fuera del trabajo. Las prendas no deben tener bolsillos externos, botones o cremalleras y deben estar limpias. Además, la ropa reutilizable deberá lavarse y desinfectarse periódicamente.

Más elementos

Desde el Grupo Dihex también consideran esenciales otros aspectos como la impermeabilidad y transpirabilidad, ya que puede proteger al trabajador de enfermedades. Los colores específicos también tienen su importancia. Los claros facilitan la detección de posibles contaminantes en la ropa, mientras los oscuros pueden ocultar manchas.

El diseño práctico y ergonómico es otra característica ligada a la comodidad y funcionabilidad para el trabajador. Contribuyen a una actividad más eficiente y segura, evitando la entrada de partículas contaminantes. Además, se recomienda ropa de fácil limpieza y desinfección para prevenir la propagación de bacterias y mantener altos estándares de higiene.

“Invertir en ropa laboral de calidad no sólo protege a los trabajadores, sino que contribuye a la reputación y éxito a largo plazo de las operaciones en una industria alimentaria” puntualizan en Dihex.