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ENTREVISTA

"He llamado a todas las puertas"

 

"He llamado a todas las puertas"

Vinculado a los movimientos sociales desde su juventud, Ricardo Cabezas es el representante de los colectivos sociales de la margen derecha del Guadiana e interlocutor ante las administraciones de las reivindicaciones de esta zona. Su protagonismo ha suscitado desconfianzas y críticas. En estos momentos guarda uno de los secretos más preciados: el proyecto que Rodríguez Ibarra tiene previsto para solucionar el problema del barrio de Los Colorines.

--¿Cómo surgió su interés por el movimiento vecinal?

--Yo nací y me crié en El Gurugú, donde decidí quedarme. Es un compromiso personal y compartido con mi mujer, Manoli. En mi juventud estaba en la Vanguardia Obrera y ella en la Juventud Obrera Cristiana. Desde entonces hemos luchado porque se solucionen los problemas del barrio, que al principio eran de primera necesidad, ahora son diferentes.

--Preside la asociación de vecinos de El Gurugú, es el portavoz de la margen derecha del Guadiana y de la plataforma de Los Colorines. ¿Cómo alcanzó esa popularidad?

--Por mi trabajo he tenido una relación con las instituciones que otros no han tenido, de ahí que me conozca más gente, pero en mi barrio hay otras personas con un bagaje social grande, que son mayores, como el señor Manolo, El comino , una persona entrañable dentro de El Gurugú. Luego, mi mujer y yo tuvimos un papel protagonista en la recuperación de Las Candelas y a raíz de esto surgió el contacto entre las distintas asociaciones de la margen derecha. Empezamos a tratar problemas comunes y a reivindicar soluciones. Hemos conseguido juntos varios logros.

--¿Cuál es su papel en Los Colorines?

--Un grupo de vecinos pidieron el apoyo y la colaboración de la asociación de El Gurugú, porque Los Colorines están allí. No me podía negar apoyo a gente que tenía un problema bastante gordo. Luego se ha constituido otra plataforma, pero yo ahí no quiero entrar. Los vecinos están esperanzados porque he mantenido reuniones con políticos que nos han dado esperanza. Agradezco la confianza que han depositado en mí, les he dicho que si yo me he metido en esto es para intentar buscar una solución. El problema real es que hay 20 familias que están viviendo un infierno por culpa de otras 150 familias.

--¿Es verdad que habló con el presidente de la Junta de este tema? ¿Qué le dijo?

--Tuve una reunión con Ibarra y me dijo que hay una solución para Los Colorines, me explicó el proyecto, pero dí mi palabra de no desvelarlo y así será.

--Le tachan de defender intereses políticos. ¿Qué opina?

--Yo no milito en ningún partido, tengo mis preferencias políticas, pero no soy el correveidile ni la persona que tiene el partido que gobierna en Extremadura para parar a la gente. Soy libre, no estoy atado a ningún partido, he llamado a las puertas de todo el mundo y unos partidos las han abierto y otros no. Sobre las medidas acordadas para Los Colorines se ha hecho poco, se ha derribado el colegio y se está preparando una oficina, espero algo más y más rápido.

--¿Qué futuro le augura usted a los barrios de la margen derecha del río Guadiana?

--Tiene perspectivas de futuro, es una zona en expansión y el progreso vendrá por la construcción de viviendas, pero no sociales. Hay muchas cosas que convierten a la margen derecha en una de las zonas con un futuro prometedor.

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