La maleza se apropia de las zonas verdes de la carretera de Valverde que nadie cuida

Los vecinos de Las Vaguadas, que a diario recorren varias veces el tramo desdoblado de la carretera de Valverde, no pueden entender que las zonas verdes que se diseñaron con la obra, en la que la Junta de Extremadura invirtió 8,4 millones de euros (de los que el presupuesto del ajardinamiento pudo rondar los 600.000 euros), se echen a perder porque las administraciones autonómica y municipal no se ponen de acuerdo sobre las competencias en esta vía, que todavía no ha sido traspasada al ayuntamiento.

La Junta dice que los jardines son responsabilidad del ayuntamiento, como en todos los municipios de la región, mientras que el ayuntamiento afirma que está dispuesto a hacerse cargo, pero antes se deben subsanar las deficiencias que presenta la obra, incluidos los jardines, pues el equipo de gobierno aduce que los ciudadanos de Badajoz no entenderían que les costase dinero algo que corresponde a la empresa que hizo el trabajo y que está obligada a entregarlo en perfectas condiciones.

La obra de desdoblamiento concluyó hace ahora un año. Guillermo Villasán, presidente de la Asociación de Vecinos de Las Vaguadas, asegura que desde hace seis meses "allí no hace nadie nada" y eso ha supuesto que "la maleza lo haya contaminado todo", no solo los arriates y los espacios destinados de las zonas verdes, sino que las malas hierbas se han montado sobre las aceras, "que en algunos sitios son casi intransitables". Afortunadamente las plantas sembradas todavía no se han echado a perder porque el riego sigue funcionando, pero está descontrolado en los horarios y no todos los aspersores están bien dirigidos porque nadie se encarga del mantenimiento.

Villasán no quiere culpar "ni a unos ni a otros" pero el resultado es que "los perjudicados somos nosotros" y "es una pena que después de lo que ha costado, se esté estropeando".

El consejero de Fomento, José Luis Quintana, reconoció esta semana, durante una visita que realizó a la ciudad, que no había habido ningún avance con el ayuntamiento pacense y reiteró que la Junta no mantendrá las zonas verdes, salvo una excepción, acceden a quitar la hierba que impida la vista a la circulación rodada.

En el ayuntamiento también tienen sus razones. El primer teniente de alcalde, Francisco Javier Fragoso, reconoce que los vecinos tienen toda la razón e insiste en que la postura del ayuntamiento siempre ha sido en que está de acuerdo "en quedarnos con la jardinería y con todo, pero queremos recibirlo en un estado de decencia". Por ejemplo, si han crecido jaramagos es porque han echado en los jardines tierra que no está depurada, cuajada de semillas, y si ahora lo recepciona el ayuntamiento el mantenimiento supondría un gasto enorme. Además, según los informes elaborados por los técnicos municipales, que han sido remitidos a la Junta, "el suelo no ha sido convenientemente preparado, no está rastrillado, nivelado ni desterronado".

Asimismo, como las plantaciones se han realizado en verano, advierten de que puede que se produzcan más marras y por tanto consideran que debe correr a cuenta de la empresa que ha realizado las obras. Respecto al riego, piden aspersores antivandálicos (los de ahora no lo son) y existen otras deficiencias en los materiales empleados.

En materia de vías y obras, hay grietas en el carril bici, que además debería ser de color verde, no rojo; los adoquines de la mediana están colocados con demasiada inclinación, lo que ha provocado desprendimientos, y hay terrazos sueltos porque se colocaron sobre una capa de arena en lugar de mortero de cemento, entre otros desperfectos. Por todo ello, Fragoso señala que "nuestra voluntad de quedarnos con la carretera es manifiesta, pero no nos vamos a quedar con las chapuzas".