«Las mujeres también podemos torear»

• ¿La tauromaquia es un mundo de hombres? ¿Es más difícil para una mujer?

Yo creo que sí, pero las mujeres también podemos torear. Si es difícil para un hombre, es un poquito más difícil aún para una mujer. Hay muchísimos toreros, pero toreras hay menos. Creo que también influye el miedo de las personas a entrar en este mundo.

• ¿De dónde viene su afición por los toros? ¿Existe antecedente en su familia?

Sí. Mi padre, Juan Carlos Lancho, fue novillero y ahora es banderillero. Él empezó con mi tío, Israel Lancho, matador de toros. Desde pequeña me encantaba ir a la plaza, además siempre veía los toros por la tele. Ah, y mi bisabuelo también fue ganadero de toros bravos. De ahí me viene la afición. Hace dos o tres años fue cuando decidí que quería ser torera.

• ¿Se ha enfrentado alguna vez al toro?

Toreé el año pasado una becerra. Sin saber hacerlo y sin práctica me puse delante. Mi tío Israel nos invitó a un tentadero en Carriquiri, echaron una becerra y entré con él. Luego ya me animé y le dije a mi padre que quería entrar sola. Fue bastante bien, yo pensaba que no iba a conseguirlo, no sabía ni dar un muletazo. La gente que estaba allí presente me dijo que para ser la primera vez, lo había hecho genial.

• ¿Qué siente cuando sale a la plaza?

Me da mucho respeto.

• ¿Torero se nace o se hace?

Yo creo que se nace. Si tú ves los toros desde pequeño y tienes afición, creces con ello.

• ¿Cree que la Escuela de Tauromaquia de Badajoz ofrece una buena formación a los aprendices de torero?

Yo llevo muy poco tiempo, dos meses, pero te preparan bastante bien. Las clases son tres veces por semana en horario de tarde. Por ahora mi experiencia está siendo muy satisfactoria. Es verdad que yo me inicié con un poco de ventaja, ya que mi padre me había enseñado a torear anteriormente, pero me está yendo bastante bien.

• Debido a su edad, sigue acudiendo al instituto. ¿Cómo compagina la vida escolar con la del toreo?

Hay veces que no puedo venir a entrenar porque tengo que estudiar. Pero se lo digo a los maestros y no pasa nada, lo entienden. 

• ¿Quiere ser torera de mayor?

Hasta donde llegue. Si llego a ser novillera con picadores, pues hasta ahí, estaré contenta. Mi objetivo también es ser veterinaria, pero sobre todo, lo que verdaderamente quiero es ser torera.

• ¿Cómo ha acogido su familia su faceta de torera?

Pues mi familia en un principio no quiso apuntarme a la escuela. Mi padre no me hizo mucho caso, pero luego ya me apoyaron con la decisión. Me dijeron que hiciese lo que realmente me gustase.

• ¿Quién es su torero o torera favorita? ¿En quién se inspira?

Mi favorito y de quien me inspiro es en Roca Rey, me gusta mucho como torea. Igualmente de cada torero me gusta una cosa, todos tienen algo especial. 

• ¿Qué le recomendaría a una chica que quiera iniciarse en el mundo del toreo?

Le recomendaría perder la vergüenza. Yo al principio lo sentía así, eran todos niños y yo la única chica. Poco a poco vas ganando amigos. Yo he tenido buena acogida, mis compañeros siempre cuentan conmigo. Si cualquier chica quiere empezar, que no tenga miedo. Lo único que se debe tener es respeto al toro. 

• ¿Cuáles son sus expectativas cara al futuro?

Torear una becerra y luego ya, más adelante, un novillo. En el futuro me gustaría ser conocida como una novillera que persigue el sueño de ser torera y que, además, torea bastante bien.