Sin plazas de dos años en Cerro Gordo: «Me planteo irme de del barrio si el problema sigue»

19 niños se quedan fuera, por el momento, del aula para niños de dos años en el colegio de Cerro Gordo y, por ello, muchos de estos padres se plantean marcharse del barrio.

Este aula se puso en funcionamiento en septiembre de 2021 y cada año ha cubierto las 54 plazas que se ofertan, superándose con creces el número de solicitudes. Para el próximo curso han sido 70 los menores que han optado a entrar en este recurso educativo. 

De este modo, 19 niños se quedan fuera del aula, por el momento, ya que se reservan tres plazas para alumnos con necesidades especiales, en el caso de que ninguno de esos puestos se solicitaran se pondrían al servicio del resto. Un grupo de padres cuyos hijos no han obtenido sitio piden a la consejería de Educación soluciones para uno de los barrios con más población infantil de la ciudad. 

«Me planteo mudarme, no puedo permitirme 40 minutos para llevar al niño a la guardería a Badajoz, otros tantos para salir y luego irme a Mérida a trabajar»

Belén Garzón

— Madre afectada

Conciliación complicada

Ramón Calvino es uno de ellos y sabe que su hija Paula no entrará en el colegio, al menos este año, ya que se encuentra en el puesto 65, por tanto, tiene a 11 niños por delante en lista de espera. Calvino se convertirá en padre de nuevo en octubre, había decidido matricular a su hija en este aula porque viven «a 20 metros del centro y el poder llevarla a un colegio en el barrio ayuda mucho a conciliar». 

Otra de las afectadas es Lorena Colazo, madre de Hernán y también cuestiona si existe conciliación posible «trabajando en un sitio de Badajoz, el niño va a la guarde en otro y vives en el Cerro Gordo». Una situación similar vive Belén Garzón. Ella trabaja en Mérida, su marido comienza su jornada laboral a las 7.00 de la mañana y en un futuro cercano tendrá que llevar a su hijo a una guardería en la ciudad, ya que en su barrio solo existe una ludoteca. Ella incluso va más allá: «Me planteo mudarme, no puedo permitirme 40 minutos para llevar al niño a la guardería a Badajoz, otros tantos para salir y luego irme a Mérida a trabajar», justifica. 

Menos posibilidades de acceder a Infantil

Este es un problema que trasciende en el tiempo: «Si no entra en el aula de dos años, las posibilidades de acceder a Infantil se reducen mucho», explica Miguel Samino, padre de Manuel. Muchos afirman que es un problema recurrente: «Es un barrio de familias jóvenes, hay exceso de niños en el aula de dos años, en Infantil y no han construido el instituto aún», reflexiona Calvino. «Es tan fácil como mirar el censo para saber que faltan plazas», pide otro de los afectados, Felipe.

Por ello, solicitarán soluciones a la consejería: «Pueden aumentar la ratio para este aula o hacer un edificio anexo para acabar con la escasez de espacio», propone otra de las madres afectadas, Estíbaliz Barriga. Aseguran que seguirán movilizándose por el futuro de sus hijos.