Entran en funcionamiento otras nueve cámaras para el control del tráfico en Badajoz

Las red de cámaras de videovigilancia del tráfico en Badajoz crece. Esta semana, han entrado en funcionamiento las 9 últimas que se han instalado en otros tantos cruces del casco urbano, que se suman a las 24 que ya estaban operativas. En total, son 33 cámaras que cubren hasta 105 calles y avenidas de la ciudad, debido a que su ubicación estratégica permite que el área de visión no se reduzca a la vía donde se coloca, sino que es mucho mayor (alguna de ellas, como la de la avenida Sinforiano Madroñero, ofrece hasta cuatro puntos de visión en sus diferentes tramos).

El ayuntamiento licitó el suministro e instalación de las nuevas cámaras en noviembre por 99.957 euros. La empresa Sice fue la única que se presentó y se le adjudicó el contrato por 99.458 euros. El pliego contemplaba 8 cámaras y en su oferta introdujo como mejora una más.

Los nuevos aparatos se han instalado en la glorieta de Las Grullas del Cerro de Reyes (de la que se obtiene imágenes de la avenida Luis de Góngora, Lucas Vázquez Ayllón, Pablo Neruda, Suecia y Alemania); en la glorieta de la avenida Manuel Rojas Torres (cruce de Circunvalación con el puente de San Roque); en el cruce de Felipe Trigo con la avenida Antonio Hernández Gil; y en el de la avenida de Pardaleras con la de Antonio Cuéllar Gragera; y en la avenida del Diario Hoy con la carretera de Corte de Peleas, que también graba la B-22.

Además, hay otras en el cruce de Padre Tacoronte con la calle Gurugú; en la glorieta de la avenida Adolfo Suárez con Carolina Coronado (que cubre también Adolfo Díaz Ambrona y el puente de Palmas); en la glorieta Juan José Venero (puente Real, paseo Fluvial y avenida de Sinforiano Madroñero) y en la rotonda de Ifeba (avenida de Elvas y avenida de Rui Nabeiro), que es la de mejora.

Las cámaras se han montado a 12 metros de altura, con columnas de acero rellenas de hormigón hasta la mitad para evitar las vibraciones. Cuentan con funciones como la búsqueda por apariencia y de comportamientos inusuales, así como análisis de vídeo de autoaprendizaje para detectar patrones.

El resto de puntos

El resto de cámaras de monitorización del tráfico se ubican en la autopista (en los cruces de la BA-20 con la carretera de Sevilla, Fernando Calzadilla, María Auxiliadora, el paseo Fluvial, avenida de Colón y la avenida de Elvas), así como en el cruce de Ricardo Carapeto con Santo Cristo de la Paz. También hay otras situadas en la plaza Dragones Hernán Cortés, Sinforiano Madroñero (en los cruces con María Auxiliadora y Godofredo Ortega Muñoz), las rotondas de Caldas da Rainha, de José Miguel Benegas y de los Tres Poetas; en las plazas de Minayo, la Constitución y Conquistadores; en puerta de Palmas; Jaime Montero de Espinosa con Damián Téllez Lafuente; y en Ramón y Cajal con Colón. Además, existen cuatro más en El Campillo, la plaza de España, la de San José y el cruce de Juan Carlos I con Menacho. 

En todos los accesos a la ciudad y en los puntos donde se ubican se alerta de su presencia con carteles. En el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) del 9 de abril se publicó el anuncio del decreto de alcaldía que amplía la autorización para la instalación y uso de cámaras de control de tráfico, donde también se recoge cómo pueden ejercer su derecho los ciudadanos para la protección de datos de carácter personal.

Decisiones en tiempo real e investigación de siniestros

Alterar las fases semafóricas, agilizar la llegada de los servicios de emergencia en caso de accidente o enviar a agentes a regular la circulación en determinados puntos en los que se registren incidencias. Son decisiones que la Policía Local de Badajoz puede tomar en tiempo real gracias a la red de cámaras de videovigilancia del tráfico, que se gestionan desde el centro de control ubicado en la jefatura de Valdepasillas. Se trata de un videowall con 20 pantallas de 55 pulgadas cada una y vigilancia permanente.  

También, según destaca el superintendente, Rubén Muñoz, esta tecnología es «de gran utilidad» cuando se adoptan medidas especiales en materia de tráfico por el desarrollo de actividades en zonas de la vía pública sin tráfico rodado, como pueden ser manifestaciones o concentraciones, ya que permiten visualizar los perímetros y actuar en función de la densidad o fluidez de la circulación.

Pero, además, este ‘Gran Hermano’ del tráfico en el casco urbano supone «una gran ayuda» en la investigación de siniestros viales y en la resolución de otras incidencias o delitos que puedan cometerse en las áreas que cubren. Las cámaras graban las 24 horas del día.

Según Muñoz, la cada vez más amplia red de cámaras de videovigilancia del tráfico, unida a otras medidas como la instalación de cinemómetros fijos para controlar la velocidad de los vehículos en vías principales del casco urbano, de los radares pedagógicos y los fotorrojos, han convertido, en la última década a Badajoz, «en una ciudad tecnológicamente avanzada en materia de operativa policial». A ellas se sumarán en el futuro otras actuaciones para el control de zonas de bajas emisiones, en las que ya se está trabajando desde este servicio municipal.

No obstante, el superintendente aclara que las cámaras son un «complemento» a la función policial, que en ningún caso sustituye la labor de los agentes de la Policía Local, pero sí permite prestar un servicio «más eficaz, eficiente y de calidad» a los vecinos.