Formación con corazón

Nueva vida a los recortes de madera

El instituto San José de Badajoz logra una ayuda de Caixabank Dualiza para un proyecto que consiste en aprovechar desechos para fabricar muebles y juguetes edicativos destinados a colectivos del Progreso

El profesor Antonio González-Haba, con sus alumnos.

El profesor Antonio González-Haba, con sus alumnos. / A. M. R.

Ascensión Martínez Romasanta

Ascensión Martínez Romasanta

Aprovechar los recortes inservibles de madera para fabricar muebles auxiliares y juguetes didácticos destinados a colectivos y centros educativos del entorno. Esta iniciativa práctica y solidaria le ha valido al instituto San José de Badajoz para ser uno de los elegidos en la convocatoria de ayudas de Caixabank Dualiza y FP Empresa. El proyecto se denomina ‘Residuos solidarios, comunidad y sostenibilidad’ y es el único de Extremadura de los 47 seleccionados.

El profesor Antonio González-Haba explica que la idea surgió por la relación que tiene el instituto con la carpintería Axis, donde hacen prácticas de Formación Profesional Dual. En esta empresa trabajan con tableros de los que resultan muchos restos, que para ellos son desperdicios porque no pueden reutilizarlos en sus productos (cocinas, armarios, puertas y mobiliario a medida). Todos estos recortes van a la basura. «Hablando con ellos comentamos que era una pena que se desperdiciasen y no se les diesen una segunda vida», apunta. Hace un par de años, los alumnos empezaron a hacer prácticas de corte o grabado en el instituto con este material de desecho, en lugar de utilizar tableros nuevos.

Con la empresa

Los alumnos que participan en el proyecto son de los ciclos de Madera y Mueble. En concreto, van a empezar los del grado superior de Diseño y Amueblamiento y después los de grado medio de Carpintería y Mueble. «Ellos tienen que realizar la práctica y no nos hace falta estropear material sin ton ni son», argumenta González-Haba.

El proyecto de Caixabank Dualiza siempre tiene que ligar un centro educativo con una empresa y si es posible por la FP Dual. La propuesta la presentó el instituto con Axis. A esta idea inicial le dieron una segunda vuelta. Los recortes son pequeños. Pensaron entonces en fabricar mobiliario auxiliar (mesitas, zapateros, bancos y taburetes) y también juguetes didácticos (con Montessori). A partir de ahí, involucrar a toda la comunidad del barrio. Se han puesto en contacto con la Comisión Comunitaria de Salud, que agrupa a todas las asociaciones vecinales, de mujeres, colegios, institutos, parroquia, centro de salud y les han presentado el proyecto. «Están encantados, les hemos pedido que nos indiquen sus necesidades y en función de eso empezamos a diseñar». Ya les han sugerido bancos y mesas para los niños. Una vez que estén definidas, harán el diseño, el desarrollo del producto y cuando tengan el prototipo empezarán a fabricarlo.

Es la primera vez que presentan candidatura a esta convocatoria. La ayuda es de 10.000 euros para la adquisición de maquinaria y material auxiliar. El proyecto se desarrollará durante lo que queda de curso. Con la idea de que «si cuaja y nos resulta interesante, sigamos trabajándolo en el tiempo», aduce el profesor. La materia prima la tienen gracias al compromiso de Axis, que selecciona los restos de tableros factibles de utilizar y los trasladan al centro, «más no podemos pedir». Además de asesoramiento técnico.

Manu Gutiérrez es uno de los alumnos que va a participar. Es su segundo año en el instituto San José. Procede de un grado medio de Informática y cambió de sector. Está plenamente convencido de las bondades del proyecto, «porque permite aprovechar material que se va a tirar para hacer algo que se va a utilizar, de hecho, nosotros los tableros nos han venido muy bien para practicar cortes, grabados con láser. Algunos me los llevo para hacer cosas para mi casa, ahora voy a hacer un zapatero».

Su compañera Belén Maldonado no sabía qué estudiar al acabar Bachillerato, solicitó tres grados y entró en éste. «Nunca había trabajado con madera y fue como un reto, no sé si me voy a dedicar, pero me gusta». La iniciativa en la que ahora se implica «me parece una idea genial, porque puedes dar una segunda vida a este material, que es una pena que vaya a la basura».