se adjudicó en abril de 2023 por 1,8 millones de euros y el plazo de ejecución es de 11 meses

Arranca la obra de los pisos de la Guardia Civil para destinarlos a alquiler social en Badajoz

El procedimiento de adjudicación se hará de forma paralela para que las familias las ocupen en cuanto terminen los trabajos, según la Junta

Esta primera fase afecta a 40 viviendas y la Consejería de Infraestructura sigue gestionando la cesión de las 50 restantes con Interior

Vallado en el perímetro de los pisos de la Guardia Civil en Suerte de Saavedra.

Vallado en el perímetro de los pisos de la Guardia Civil en Suerte de Saavedra. / S. GARCÍA

Belén Castaño Chaparro

Belén Castaño Chaparro

Ya han comenzado las obras de rehabilitación de los conocidos como pisos de la Guardia Civil, en la barriada pacense de Suerte de Saavedra, que se destinarán a alquiler social. La empresa encargada de los trabajos, Albero Extremadura, ha instalado el vallado en el perímetro del edificio, ubicado en la calle Eduardo Naranjo, esquina con Vicente Prósper. 

En esta primera fase, se acometerá la rehabilitación de 40 viviendas del total de las 90 que hay en los cinco bloques, propiedad del Ministerio del Interior. De las primeras, tras años de negociación, la Junta de Extremadura ya tiene la titularidad y se sigue gestionando la cesión de las 50 restantes, según fuentes de la Consejería de Infraestructuras, Transporte y Vivienda.

La intención es que el proceso de adjudicación de estas primeras 40 viviendas se realice de forma paralela a los trabajos de rehabilitación, para que puedan ser ocupadas por las familias a las que correspondan en cuanto estén listas, según explicó la Junta.

Las obras se adjudicaron en abril del año pasado por 1.820.000 euros. Aunque inicialmente estaba previsto que comenzaran a principios del verano, los plazos se demoraron. La segunda fecha que se dio para esta actuación fue octubre de 2023, pero los plazos tampoco se cumplieron. En estos meses, la adjudicataria ha visitado en varias ocasiones el edificio para planificar la intervención. 

El plazo de ejecución, según el pliego de condiciones del contrato, es de 11 meses, por lo que si no surgen imprevistos, deberían estar acabadas a finales de este mismo año.

Infografía de cómo quedará el bloque tras la rehabilitación.

Infografía de cómo quedará el bloque tras la rehabilitación. / LA CRÓNICA

Con este proyecto se reducirá en más de un 20% el consumo de energía primaria no renovable del inmueble. Los trabajos, según recoge el proyecto, consistirán en la mejora del aislamiento térmico de fachadas, cubiertas y suelos, carpinterías y acristalamiento de los huecos, de forma que se limite la demanda energética necesaria para alcanzar el bienestar térmico en función del clima y del uso del edificio. También se harán a accesibles las zonas comunes y las viviendas y se acometerán trabajos de mantenimiento y reparaciones para resolver los problemas de humedades.

Más de 7 años de espera

Los vecinos de Suerte de Saavedra llevan más de 7 años esperando a que estos pisos se recuperen y durante este tiempo la asociación vecinal no ha dejado que su reivindicación cayera en el olvido, denunciando en repetidas ocasiones el deterioro progresivo de estas viviendas y la gran necesidad de que se pusieran a disposición de quienes las necesitan. 

En este sentido, el presidente y el secretario de colectivo, Fernando Gonsalbes y Rodolfo Jaime, respectivamente, insistieron son muchas las personas de Suerte de Savedra que no solo tienen necesidad, sino que quieren «quedarse en el barrio». Ambos coincidieron al reclamar que el procedimiento de adjudicación se lleve a cabo «de manera transparente» y se dé una información clara a los interesados para que las soliciten. «Solo pedimos que se adjudiquen de acuerdo con la ley», insistió Rodolfo Jaime.

En cuanto a las 50 viviendas pendientes de cesión -para las que el proyecto de rehabilitación ya está redactado-, los vecinos confiaron en que el ministerio las ponga a disposición de la Junta de Extremadura «cuanto antes» y no se prolonguen los plazos como ha ocurrido con las primeras 40. Antes de que se intervenga habrá que resolver el problema de las okupaciones, pues en ocho de los pisos que aún no son de titularidad regional residen familias desde hace años.