Entrevista | Miguel Murillo Fernández Dramaturgo

«Para mí la vida es el teatro. Mi sueño es vivir de esto»

Miguel Murillo Fernández es estudiante de último año de Filología Hispánica, y además, dramaturgo. Con tan solo 26 años, este joven autor ha escrito cinco obras teatrales que ya han sido representadas. Actualmente, ha publicado dos comedias que plantea también llevar a escena.

El dramaturgo Miguel Murillo Fernández posando con sus dos últimas obras junto al teatro López de Ayala.

El dramaturgo Miguel Murillo Fernández posando con sus dos últimas obras junto al teatro López de Ayala. / Santi García

Claudia Goyeneche

Claudia Goyeneche

  • ¿Cómo comenzó su carrera como dramaturgo? ¿Hubo alguna experiencia que le hizo seguir este camino?

Desde que tenía nueve años empecé a escribir en un ordenador que teníamos en casa. Escribía guiones, puras conversaciones de todo lo que veía a mi alrededor. Esto fue construyendo un hábito en mí, y mi padre, al verme esta inquietud, comenzó a darme libros. Tengo la suerte de tener como tío a Miguel Murillo, que me ha influenciado, y con 16 años empecé a escribir mi primera obra: ‘El Reino de Caín’. Mis padres se la dieron a mi tío Miguel, y él vio algo y me dijo: «tú eres de los que debe seguir formándose porque aquí hay un dramaturgo». Con 18 años escribí una obra que ganó el VII Premio Textos Teatrales Autor Extremeño FATEX. Ese fue el momento en el que di el salto, a la gente le hacía gracia: «el sobrino de Miguel Murillo que se llama como él, y encima escribe teatro», decían. 

  •  ¿En qué se inspira para escribir sus obras?

Sobre todo en la calle. Hay veces que veo cosas a mi alrededor y de repente percibo una especie de detenimiento de la realidad. Me quedo observando y eso sugiere en mi interior cierta inquietud por la cual surge la voz, por la que tengo que ir corriendo a escribir. Cualquier persona que se dedique a escribir tiene que salir a la calle. La imagen del escritor en su torre de marfil no suele ser útil.

  • ¿Los personajes que aparecen en sus obras los identifica con personas reales?

A veces hago una especie de ‘pastiche’. Hay veces que es un mero calco, y hay veces que de esas personas cojo su esencia y hago un atavío esperpéntico, como si fuesen marionetas. Pero todo depende del tipo de obra. 

  • ¿En sus obras, prefiere personajes femeninos o masculinos?

En mi teatro suele haber personajes femeninos protagonistas, poderosos e incluso venenosos. No sé por qué en mí hay una naturaleza femenina al escribir, de ahí que suelen ser mujeres protagonistas. Igualmente no tengo preferencia, es lo que salga en ese momento.

  • ¿Existe la cultura teatral en Badajoz?

Yo creo que sí. Incluso lo podemos extender a Extremadura. Hay mucha actividad teatral que se mueve aquí, y sobre todo son compañías amateur. Igualmente es una disciplina artística muchas veces olvidada. Los premios Ciudad de Badajoz no tienen categoría para el teatro pero, en cambio, en la gala de premios se recurre a escenas teatrales. 

  • ¿Qué es para usted la magia del teatro?

Que en cualquier tarima de cualquier teatro se pueda convertir a una persona mediocre y pobre en un rey. Hacer de esa tarima, por unos momentos, un palacio. Y sobre todo conseguir que personas que vienen de su trabajo, con sus agobios familiares, personales y económicos, se olviden de esa vida y se concentren tanto que vuelvan a ser niños.

  • ¿Cuál es para usted la parte más importante de una obra teatral?

Sin actores no hay teatro. Para su culminación, cada obra debe ser representada. Para que sea así, a parte de director, técnicos y sonidos y demás, se necesitan a los actores.

  • ¿En qué punto se encuentra el panorama teatral actual en Badajoz?

Hace poco hemos tenido un IVA cultural demoledor. Por suerte ha cambiado. Igualmente no se valora el trabajo realizado. Intentar ahorrar dinero con el autor, pero no con otros elementos de la representación, me parece vergonzoso. Hacen falta leyes que regulen este trabajo. 

  • ¿Piensa dedicarse a ello exclusivamente?

Mi idea es ser profesor, ganarme la vida así con el objetivo de hacer teatro. Para mí la vida es esto, yo quiero esto. Mi sueño es vivir del teatro.

  • ¿Cuáles son sus aspiraciones cara al futuro?

Seguir escribiendo mi novela actual. Quiero que algún día la gente me conozca como autor de comedias. Ahí es donde me siento más cómodo, pero sobre todo, escribir. Siempre me consideraré un imaginario.