LA VISTA POR ESTOS HECHOS, OCURRIDO EN JULIO DE 2016 EN MONESTERIO, COMENZARÁ EL PRÓXIMO 13 DE MAYO EN LA AUDIENCIA PROVINCIAL DE BADAJOZ

Juicio por el crimen de Manuela Chavero: arranca el proceso para formar el jurado popular

De las 36 personas elegidas por sorteo, seis han presentado excusas para no participar y el magistrado debe ahora resolver si las acepta

Las partes escogerán entre los candidatos disponibles a los 9 miembros y dos suplentes que determinarán si Eugenio D. es culpable o no de su muerte

Eugenio D. acusado de la muerte de Manuela Chavero, custodiado por agentes de la UCO, en una imagen de archivo.

Eugenio D. acusado de la muerte de Manuela Chavero, custodiado por agentes de la UCO, en una imagen de archivo. / VANESA LOZANO

Belén Castaño Chaparro

Belén Castaño Chaparro

A 24 días de que se inicie en la Audiencia Provincial de Badajoz el juicio por el crimen de Manuela Chavero, ha arrancado el proceso para elegir al jurado popular que determinará si el único acusado, Eugenio D., es culpable o no de la muerte de esta vecina de Monesterio de 42 años, desaparecida en julio de 2016 y hallada más de cuatro años después enterrada en una finca de esta misma localidad pacense.

De las 36 personas inicialmente seleccionadas por el sorteo dentro del censo electoral, en el periodo de excusas, seis han expuesto motivos para no participar en este proceso. Ahora el magistrado deberá resolver si las acepta o no. En caso de que todas fueran admitidas, quedarían 30 candidatos disponibles, entre los que la fiscalía, la acusación particular y la defensa elegirán a los 9 miembros y dos suplentes que conformarán el jurado popular.

Como cada parte tiene derecho a tres recusaciones, la abogada de la hermana y la madre de Manuela Chavero, Verónica Guerrero, tras conocer el número de candidatos que han presentado excusas, ha solicitado que, en caso de que sea necesario, se celebre un nuevo sorteo para garantizar que haya número suficiente para conformar el jurado popular y no ocurra, como en el caso de Diana Quer que se tuvo que retrasar el inicio del juicio por este motivo. 

Prisión permanente revisable

La acusación particular solicita para Eugenio D. la prisión permanente revisable por asesinato con alevosía y para evitar que se descubra otro delito, subsiguiente a un delito contra la libertad sexual sobre la misma víctima, petición a la que se unieron la fiscalía y la Asociación Clara Campoamor, también personada como acusación particular junto a la familia.

Además, Guerrero pide que el acusado sea condenado a 20 años de cárcel por detención ilegal y otros tres años por cada uno de los tres delitos de lesiones psíquicas sufridas por la hermana y los padres de Manuela Chavero o alternativamente por tres delitos contra la integridad moral, penados con dos años cada uno.

En concepto de responsabilidad civil, reclama más de 500.000 euros para sus representados. El ministerio público propone indemnizaciones para sus hijos, padres y hermanos que superan en total los 471.400 euros.

Por su parte, la defensa, en menos de José Antonio Carrasco, como ha mantenido el imputado durante estos casi 4 años, sostiene que la muerte de Manuela Chavero fue «accidental», por lo que solicita la absolución de su cliente.

Los presuntos hechos

No lo creen así las acusaciones particulares y pública. Según el relato de la fiscalía, la madrugada del 5 de julio de 2016, sobre las 2.15 horas, el acusado, que entonces tenía 23 años, fue a la vivienda de Manuela Chavero, que se encontraba sola en su interior. Tras entablar una conversación con ella -ambos se conocían desde hacía muchos años- la convenció para que la acompañara a una casa propiedad de su familia, a unos 80 metros de la de la víctima, con la «excusa» de devolverle una cuna que le había prestado para la hija de unos amigos que lo habían visitado un año antes.

Manuela salió de su casa para recoger la cuna, con la intención de volver de inmediato, pues dejó la luz del salón, la de la cocina y la televisión encendidas y no se llevó el móvil ni las llaves, sino que cogió otras que estaban junto a la puerta. 

Una vez en la casa de Eugenio D., el acusado la abordó «sexualmente» y después le propinó diversos golpes «con la finalidad de causarle la muerte». Posteriormente, trasladó el cadáver en un vehículo hasta la finca donde la enterró. El cuerpo permaneció en este lugar hasta el 18 de septiembre de 2020, después de que el joven fuera detenido por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Dos días después, Eugenio D. ingresó, como presunto autor de la muerte de Manuela, en prisión, donde se encuentra desde entonces.