Entrevista | Mariah Oliver Fundadora y exmiembro de los Latin Kings and Queens

«En los Latin Kings tuve un status de liderazgo. Me hice respetar»

En la década de los 2000, con tan solo 18 años, Mariah Oliver (Madrid, 1982) se convirtió en la primera ‘latin queen’de España, la líder de una de las bandas organizadas con mayor reconocimiento en el panorama nacional. Tras años de reflexión y tras pasar unos meses en prisión, la expandillera presenta este lunes su libro Latin Queen. Ascenso, caída y renacer desde el corazón de una banda en la sede de Fundación CB de Badajoz. Un relato en primera persona sobre su experiencia como reina de los Latin Kings y su labor actual como investigadora de bandas juveniles en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona

Mariah Olivero en la calle San Juan de Badajoz.

Mariah Olivero en la calle San Juan de Badajoz. / Santi García

Claudia Goyeneche

Claudia Goyeneche

  • ¿Cómo y cuándo surgió la idea de plasmar en un libro su experiencia como fundadora de las Latin Queens?

Surge a la vez que comienzo mi tesis doctoral sobre la participación de mujeres en las bandas. Me di cuenta que aunque en mi tesis comparto mi experiencia, es bastante complicado hablar de ello de forma subjetiva. Tenía una parte de experiencia personal con la que no sabía qué hacer. Durante ese tiempo me contactó una editorial y me ofreció la publicación del libro. De ahí surgió la idea.

  • ¿Le ha costado mucho rememorar su experiencia como expandillera para este libro?

Sí, la verdad es que sí. Había que hacer mucho trabajo de revivir situaciones no agradables. Situaciones que no he vuelto a valorar, por lo que ha sido complicado. Pero la experiencia ha sido muy buena. Lo más difícil, sobre todo, la época de la cárcel.

  • ¿Es fácil acceder a una banda callejera? ¿Cómo fue su experiencia?

Sí, es fácil. Al principio la parte de la violencia no está tan presente, en un inicio todo es positivo: la fraternidad, el grupo... Luego ya se van metiendo en cuestiones ilegales. La experiencia es más complicada de lo que se piensa. Hay un lado bueno, te sientes en una familia, en un espacio propio no regido por personas adultas o por la familia. Vives en un momento en el que construyes tu personalidad, y si tienes relación con una banda construyes facciones de tu personalidad en función del grupo.

  • En su caso particular, ¿qué le llevó a entrar en los Latin Kings?

En mi caso fue una combinación de factores. Por un lado el atractivo de la estética de estos grupos: su estilo musical y su forma de relación personal y social. Por otra parte la defensa de ideales, en esa época sufrían mucho racismo. Esa lógica de unirse y defenderse uno a los otros me parecía atractivo.

  • ¿Cuál era su papel como Latin Queen? ¿Cuál es la labor de la mujer en una banda organizada?

Mi poder fue más simbólico que real. Yo tenía un status de liderazgo. Me hice respetar, tenía unos estándares muy cercanos al comportamiento masculino. En mi caso, al ser la primera tenía respeto especial, pero luego a nivel de autoridad a las mujeres se les escucha hasta un punto. Nunca prevalece nuestro criterio por encima de los hombres. Tenía libertad de movimiento, pero hasta ahí. En los grupos en muchos casos las mujeres son tratadas como mercancía u objetos. 

  • ¿Cómo se logra salir de una banda callejera? ¿Cómo se vive siendo exlatin queen?

Yo estuve en la cárcel. Cuando salí abandoné el grupo, no quería continuar con más problemas. Ya fuera de la banda, a nivel personal, es volver a empezar. Volver a buscar trabajo, empezar tu vida.

  • ¿Cuál es la situación actual de las bandas en España? ¿La estructura y funcionamiento han evolucionado a lo largo de los años?

Ahora vuelven a estar de moda y a tener presencia mediática. Si esta presencia no se trata con el cuidado debido, las pandillas atraen a más jóvenes. Con respecto a su evolución, han cambiado mucho. En muchas de ellas lo único que permanece es el nombre. 

  • ¿Cuál es la labor de las instituciones y del Estado con respecto a los jóvenes en las bandas? ¿Debería existir un sistema de prevención más eficiente?

Sí, lo mejor es la prevención. Duro es pensar que se podían haber prevenido incluso muertes de jóvenes. Existe mucha normalización y desensibilización de la violencia. Lo que hace 20 o 30 años se consideraba violento, ahora es normal. Se presenta el tipo de chico pandillero como atractivo, el típico malote que llama la atención. Esto es peligroso tanto para las mujeres como para los hombres que quieren alcanzar este estereotipo que la sociedad considera como exitoso. Hay que prevenir a nivel social, en mis estudios pude darme cuenta de que como sociedad somos culpables de no prevenir a tiempo la creación de estos grupos.

El feminismo me ha dado las herramientas para analizar aspectos como la romantización de la violencia

Mariah Olivero

— Fundadora y exmiembro de los Latin Kings and Queens

  • ¿Qué le hubiera recomendado a la Mariah de la década de los 2000, que comenzaba a sentirse atraída por los Latin Kings? 

Le hubiera recomendado que se informara sobre feminismo. Esto me ha dado las herramientas para analizar aspectos como la romantización de la violencia. Pero sobre todo, que tuviera cuidado y que no hiciera daño a nadie.