Jesús Clemente está viviendo los que probablemente sean sus últimos días como jugador del Badajoz. Su contrato acaba el 30 de junio y no da la sensación de que vaya a ser prolongado. El jugador se encuentra durante estos días de vacaciones, pero por ahora guarda silencio y no quiere pronunciarse con respecto a su futuro.
No obstante, según explican desde Lanuspe, se trata de un caso que legalmente es muy rocambolesco. El jugador tiene ahora mismo un contrato con la federación que acaba este próximo 30 de junio. Por otro lado, tenía otro acuerdo privado que no era federativo con el que hacía que su relación con el club se extendiera hasta el final del próximo curso.
Desde la que aspira a ser la nueva propiedad a partir del próximo 14 de junio, afirman que quieren que el jugador continúe y van a «hacer todo lo posible» porque sea así. Para ello, subrayan que se van a valer de todos los derechos, tanto federativos como privados que tenga el jugador, para que pueda permanecer en la entidad blanquinegra y no se una de esta manera a la larga lista de bajas de un club que ya han dejado los cuatro capitanes de esta campaña, a los que se han unido recientemente Adri Cuevas o Dani Aquino, que han sido los últimos en hacer oficial su no continuidad.
SIN PACENSES EN LA PLANTILLA
Con esta marcha, el Badajoz se queda, por el momento, y a la espera de ver cómo se mueve el mercado, sin ningún jugador pacense en su primer plantilla, ya que Clemente era el único futbolista nacido en la ciudad que representa al equipo.
El joven centrocampista llegó al Nuevo Vivero en 2020 como un perfil de mediocentro procedente del Diocesano con el que se iba a reforzar a la cantera con la expectativa de alcanzar su oportunidad con el primer equipo. No obstante, desde esa pretemporada ya demostró sus grandes prestaciones como extremo y ese mismo año disputó un buen puñado de minutos a pesar de la dura competencia. En esta última temporada, ya con el ‘7’ a la espalda, Clemente ha ido de menos a más, finalizando de manera más que notable.
