Fútbol. Segunda Federación

Las cuentas no salen para todos en Segunda Federación

Cacereño, Villanovense, Llerenense y Badajoz echan cálculos para evitar el descenso, siendo los blanquinegros quienes peor lo tienen porque, ni tan siquiera ganando todo, se aseguran salvarse

Lance del juego entre Llerenense y Cacereño en el Fernando Robina.

Lance del juego entre Llerenense y Cacereño en el Fernando Robina. / FOTOGRAFIAMAC

Quedan tres jornadas para que finalice la Segunda Federación y lo único que está claro es que el fútbol extremeño de esta categoría se enfrenta a un final de competición dramático. Todos echan números para salvar el culo porque, desafortunadamente, no se puede mirar a otra cosa que a la permanencia. Pero sólo hay una conclusión inequívoca: las cuentas no salen para todos. Se avecinan más descensos.

Y decimos más porque a la lona ya cayó el Montijo, al que le ha acompañado el pasado fin de semana el Mensajero. Badajoz, Llerenense, Villanovense y Cacereño siguen en riesgo, algunos con más papeletas que otros. ¿Por dónde pasan sus opciones?

CP Cacereño

Es evidente que quien mejor lo tiene para no pasar excesivos apuros es el Cacereño, merced a una segunda vuelta donde ha recuperado cierta regularidad y seguridad defensiva. El Cacereño suma 42 puntos y sería probable que, con algún puntito más, pudiera salir de todo peligro. Pero por si acaso, mejor una victoria que dé carpetazo al asunto. 

El Cacereño, a priori, lo tiene sencillo: ganar un encuentro. El domingo recibe en el Príncipe Felipe al Atlético Paso, un rival muy potente en Canarias, pero que lejos de las islas flojea bastante. Ese debe ser el partido de la salvación para los de Julio Cobos. Perder sería complicarse la vida porque después hay que jugar en Illescas, donde los manchegos se están jugando puesto copero; y terminar con el Numancia, que es probable que acuda a Cáceres jugándose el primer puesto y el ascenso directo. Es decir, que un manchón el próximo domingo mete al Cacereño en muchas complicaciones. Y no está la afición verde para muchos más disgustos.

No obstante, jugando al ritmo de lo visto en el Fernando Robina de Llerena, donde el Cacereño no ganó por una actuación estelar del portero local, todo indica que los de Cobos no tendrán problemas para sellar la permanencia. 

Villanovense

Si hay algo que puede incomodar al Villanovense son los nervios de haber caído de nuevo en la parte baja cuando lo tenía prácticamente hecho. El tiro en el pie que se dio el domingo ante el Unión Adarve todavía duele. Con 40 puntos, los serones tienen que ganar algún partido más, pero el calendario les lleva a partidos a cara de perro: Guadalajara, San Fernando y Ursaria, tres equipos que también se están jugando el descenso. 

Lo positivo para el Villanovense es que, en situaciones complejas, siempre suele salir airoso. Tiene gran experiencia en partidos de máxima dificultad y cuenta con un encuentro en su campo ante el San Fernando de Canarias que debe ser una final. Pero el miedo está ahí. Y es real.

Llerenense

El Llerenense es el equipo que más tiempo lleva haciendo la goma en la parte baja durante la segunda vuelta. Ocupa el puesto de promoción de permanencia, aunque con una puntuación bastante alta: 38 puntos. Hay que tener en cuenta un factor importante. Y es que el mejor sexto por abajo de los cinco grupos estaría exento de jugar el playout. Y ahora mismo, por puntos y goles, lo sería el Llerenense. Tiene los mismos puntos que el Atlético Saguntino, del grupo III, pero mejor diferencia goleadora por dos tantos. 

Pero esas cuentas, a tres jornadas para el final, no son fiables. El Llerenense tiene que centrarse en lo suyo. Ahora mismo, depende de sí mismo. Pero puede que el domingo, si pierde en campo del líder la Segoviana, ya dependa de otros. Luego recibe al Montijo y termina en el Nuevo Vivero de Badajoz. Ni con cuatro puntos podría darle para salir de la quema porque por atrás vienen San Fernando y Navalcarnero, éste último con un calendario factible.

Lo positivo para el Llerenense es que su destino estaba cantado. Es decir, en Llerena tienen muy bien asimilado que cualquier permanencia exigía un sufrimiento y trabajo hasta el final. Luismi tiene bien aleccionados a los suyos. Y sus jugadores están preparados para sufrir. 

CD Badajoz

Sin duda, es el que peor lo tiene para salvarse. Para hacerlo directo, tendría que ganar los tres encuentros que le queda: Montijo y Llerenense en casa; y Sanse fuera. Pero ni ganando los tres se asegura salir del playout. Un tropiezo el domingo en Montijo le condena. Y cualquier tropiezo en el último partido ante el Llerenense también. Por eso, en una hipotética salvación, es muy difícil que Badajoz y Llerenense quepan en la misma ecuación. Uno tiene papeletas de descenso. 

El Badajoz no va a desfallecer hasta el final. Su afición va a conquistar Montijo el próximo domingo para tratar de sellar otros tres puntos y tendrán el pinganillo en la oreja para ver si llegan buenos resultados del resto de partidos. Luego tocará jugar en Matapiñonera ante el Sanse, posiblemente en uno de los campos más difíciles de toda la Segunda Federación. 

Montijo

El Montijo, sin nada en juego, se convierte en juez del descenso. Recibe primero al Badajoz y luego va a Llerena. Todo lo que rasque irá en contra de una salvación, pero fútbol es fútbol. 

Para el conjunto rojillo, el partido ante el Badajoz es un regalo para las arcas económicas, pues las pretensiones es hacer la taquilla más grande de la temporada que puede superar los 12.000 euros de beneficio económico.