Badajoz descubre a 'Moby Dick': una de las mayores carpas de España, de 34 kilos

Como una tarde cualquiera, el pasado viernes por la tarde, Rubén Durán se dirigió al embalse del Boquerón, ubicado en el municipio de Cordobilla de Lácara. Allí, suele acudir junto a sus amigos para disfrutar de una jornada de pesca. Durante estas últimas semanas, habían ocupado un puesto de pesca que en esta ocasión ya estaba siendo utilizado por otros aficionados. «Nos quedamos pensando y decidiendo dónde podríamos ubicarnos. Fue entonces cuando encontramos un espacio libre junto al chiringuito, algo poco común», comenta Rubén. Tras un sorteo entre los cuatro pescadores presentes para escoger el puesto de cada uno, Rubén resultó ser el agraciado con el número uno.

«Visualicé mi zona y observé un gran movimiento de carpas de gran tamaño», explica el pacense. Una vez que todo estaba preparado, procedió a colocar dos de sus cañas en posición. Guiado por su intuición, se adentró en el agua para colocar un cebo artificial en una zona con aproximadamente un metro de profundidad, donde había una gran cantidad de algas, pero que a sus ojos parecía ser un lugar prometedor. 

«Alrededor de las 07:50 horas del día siguiente, una de las alarmas de se activó», señalando que una de las cañas más cercanas a la orilla había capturado algo. Tras una «bonita lucha», logró sacar del agua una carpa que pesaba 10 kilogramos.

Ese mismo día, Rubén decidió ir a dormir temprano. «A eso de las dos menos cuarto de la mañana, la alarma volvió a sonar», recuerda Rubén, que aún somnoliento y confundido por la situación, se apresuró hacia la caña. Esta vez, la sorpresa fue enorme: una carpa royal de 34 kilos hizo acto de presencia. 

Este ejemplar, conocido y bautizado por los pescadores de la zona como Moby Dick, es uno de los más codiciados. «Es uno de los ejemplares más buscados por aquí», comenta Rubén. La última vez que se avistó fue en 2021, cuando pesaba 32 kilogramos. Ahora, con dos kilogramos más, se ha consolidado como una de las carpas más grandes de España.

Según relata Rubén, sacarla no resultó ser una tarea complicada: "Este pez no luchaba, al ser tan grande pierde capacidad de movimiento. Costó más levantarla y sacarla a flote que traerla a la orilla". Su compañero, conocido como Parrita, se sumergió en el agua para ayudar a Rubén a sacarla a la superficie. Una vez dentro y con el animal en sus brazos, Parrita exclamó: «¡Tienes al carpón de tu vida!».

La estancia de Moby Dick fuera del agua fue breve. Rubén y sus compañeros siguen el método de ‘captura y suelta’ en el que el animal es devuelto al agua.

Tras acercarse otros aficionados a la pesca sorprendidos, Rubén liberó este pez de grandes dimensiones, devolviéndolo al embalse con la esperanza de que «al igual que yo, otros puedan cumplir el sueño de pescarla».